La Legislatura bonaerense será testigo de una historia de amor y odio en los próximos meses. Con las cámaras sin mayorías propias, los proyectos prometen tener un mayor alcance y tratamiento. Y entre Cambiemos y el Frente Renovador, se espera que se jueguen cosas importantes, tanto para el apoyo y el acompañamiento como para adjudicarse la autoría de los proyectos.
Si bien hace hace tiempo que el Frente Renovador viene trabajando el tema, hace unas semanas el Diputado Provincial Rubén Eslaiman puso nuevamente sobre la mesa la idea de limitar la reelección de los intendentes bonaerenses. En ese momento, el autor del proyecto se mostró confiado en que tanto el Pro y la UCR “acompañen” la medida que también incluye prohibir que un concejal tenga otro cargo en la función pública y plantea, además, limitar a una sola reelección a los legisladores bonaerenses.
A quien apuntan con este proyecto es al Frente para la Victoria, donde en varios distritos los jefes comunales llevan más de 3 o 4 periodos al frente de la comuna, aunque también la UCR tiene lo suyo, como el caso del radical Aníbal Loubet, que tras ser reelecto, cumpliría 28 años en el mando.
Ahora, quien también propuso ponerle un límite a las reelecciones de los alcaldes, fue la propia gobernadora electa, María Eugenia Vidal, quien buscará impulsar esta modificación en el territorio bonaerense.
Y para lograr esta reforma -mismo caso que le pasó al massismo- el Pro deberá tener el apoyo y el acompañamiento del bloque que responde a Sergio Massa. Desde ambas partes, se mostraron confiados de poder lograr el apoyo mutuo, pero sin embargo surge otro tema, no menor dentro del ambiente legislativo: la autoría del proyecto.
Es sabido que a los legisladores no le es muy simpático que un par suyo se apropie de un proyecto que le es propio. “Casa uno quiere tener el mérito de haber pensado y presentado la propuesta”, dijeron desde la Cámara.
Desde el sector de Cambiemos en la Provincial, a diferencia de lo que se plantea la limitación de los mandados no será un conflicto dentro de los distritos bonaerenses. Es más, el intendente kirchnerista de Avellaneda, Jorge Ferraresi fue uno de los que planteó su posición: “Hasta dos gestiones puede estar bien, pero la tercera se hace tediosa. Es imposible tener una gestión que no tenga una relación fuerte con la militancia, y si uno no lo incorpora en el espacio de la gestión y no resuelve cuestiones estructurales a través de los militantes, que son los que determinan cuáles son las demandas, el resultado no es bueno”, afirmó.
Se vienen tiempos de tironeos y acuerdos en la legislatura bonaerense. Y la reelección indefinida es un proyecto que puede generar un eterno amor, o un eterno odio entre el massismo y el Pro.
Fuente: La Tecla Info
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