Por Walter Castonjáuregui
16/03/2020
Debemos aislarnos, estamos en cuarentena y por lo visto esta situación tiende a ser extensa. De a poco las actividades se han visto reducidas y en algunos casos han sido ya suspendidas por determinados períodos de tiempo. Nadie puede decirnos con certeza cuanto tiempo va a durar esta situación, con lo cual debemos utilizar el ingenio para poder pasarla lo mejor posible.
La falta de fútbol, automovilismo, tenis y otros tantos deportes que forman parte de nuestro acervo cultural y que ocupan buena parte de nuestro esparcimiento y diversión, hacen que internet, las redes sociales, las plataformas con contenidos de películas y series, los juegos en red, estén a full.
Algunos podrán trabajar desde sus hogares otros deben concurrir a sus lugares de trabajo pero con horarios reducidos o con rotación del personal.
El sistema de transporte público se diezmado y en algunos casos paralizado.
Cada situación particular tiene sus aristas, lo que sí es común para todos, la recomendación de quedarnos en casa. Y es allí en donde podemos utilizar esa circunstancia para ayudar, porque “guardándonos” nos cuidamos y además cuidamos al prójimo.
Para muchos el día se hace interminable o queda tiempo en donde no sabemos qué hacer, los chicos en casa son todo un tema y es por ello que los propongo lo siguiente. Está terminando la temporada de verano y de a poco se aproxima el frío con lo cual es momento de comenzar a ordenar la ropa. Cuantas veces dijimos “esto ya no lo uso”, “esta campera me queda chica”, en fin el placard lleno con un numero impresionante de cosas que ya no usamos y que muy probablemente a otros les puedan servir. Además les doy un consejo que alguien hace mucho tiempo me dijo “lo que hace un año no usas, ya no lo volverás a usar”.
Solos, en pareja o haciendo participes a los chicos de la casa podemos contribuir con nuestro granito de arena. Utilicemos un rato del día, para ir separando aquellas prendas de vestir, calzado, frazadas y todo aquello que ya no forma parte de nuestras necesidades porque seguramente SI, son necesidades de otros a los cuales podemos ayudar.
Porque sería muy gratificante para cada uno de nosotros, una vez terminado el aislamiento al cual todos de alguna manera nos vemos expuestos, salir en familia a poder donar todas aquellas cosas que pudimos separar y ver como lo que parecía algo triste fue una enorme posibilidad de hacer feliz a alguien y sacarle una sonrisa.
Depende de cada uno de nosotros..