Hoy se celebran los 272 años de la fundación de San Nicolás. Y siempre sera recordado porque en esta ocasión no habrá festejos, ya que nos encuentra en el marco de la cuarentena por el Coronavirus. Aún así, no deja de ser una fecha trascendente para la ciudad.
Matrimonio fundador: Paulina Ugarte y Rafael de Aguiar
Con la aparición de una copia de un plano, rescatado de antiguos expedientes judiciales, agregado al duplicado de Mensura Nº 28, del Partido de San Nicolás, originada por la Dirección de Geodesia de la Provincia de Buenos Aires, certificada en el Archivo Público General, realizado en el año 1867, por el agrimensor Jaime Arrufó, para Teresa y Francisco Salinas, bisnietos de los fundadores, que aportó el Dr. José Ricardo Eseverri se expone esta consideración.
En el enunciado documento se lee manuscrito, el siguiente texto:”San Nicolás de los Arroyos fundada por Paulina Ugarte y Rafael Aguiar, en terrenos de su propiedad, sobre nueve manzanas de frente por otras tantas de fondo” (sic)Es de destacar, que el recuadro en el plano, donde aparece la leyenda mencionada, ocupa el espacio del sitio fundacional de la ciudad, sobre las barrancas del Río Paraná.Las personas generadoras de la mensura que originó el plano de Arrufó, Teresa y Francisco Nicolás Salinas, eran descendientes directos del matrimonio Aguiar-Ugarte, nacidos el 20 de octubre de 1837, y 2 de setiembre de 1841, respectivamente, según consta en el Árbol Genealógico, que se encuentra a Folio 139 del expediente testamentario de María Rosario Medina y Aguiar, madre de los nombrados, que, con la firma del Ing. Ariodante Ghisolfi, (1932), ha sido publicado en el libro de Gregorio Santiago Chervo, “Rafael de Aguiar. El Fundador”, (1998), quien, evidentemente, como otros anteriores historiadores de San Nicolás de los Arroyos, no ha tenido acceso al conocimiento del Plano de Mensura, realizado por el Agrimensor Jaime Arrufó en 1867, que presentamos, ya que lo menciona, pero no obstante, llama a Juana Paulina Ugarte “La Propietaria Cofundadora”.
Era sabido, y expresado, que las tierras que constituyeron la base primigenia de San Nicolás de los Arroyos, herencia de sus ancestros, fueron propiedad de doña Paulina Ugarte. También, que Damián Menéndez dice en su libro “Historia de la Ciudad de San Nicolás de los Arroyos” (1890), página 3: “Era la fundación de este pueblo por Don Rafael de Aguiar…y su esposa Doña Paulina Ugarte de Aguiar, en una área de campos, de sus numerosas propiedades.” Con el testimonio que enmarcamos, podemos aseverar que Doña Paulina Ugarte y Rafael de Aguiar, en mancomunado matrimonio decidieron la fundación de nuestra Ciudad.Actividades de Aguiar Aprovechando la excelente producción cerealera de la región, Rafael de Aguiar poseía una tahona para el procesamiento del trigo. Esta maquinaria, dice Mariana Canedo, constituía un pequeño complejo dentro de las posesiones del matrimonio Aguiar-Ugarte, obviamente en relación con el nivel tecnológico de la región y la época. Junto con la tahona existían construcciones completentarias, animales para su puesta en marcha, herramientas y repuestos; accesorios para la producción de harinas y medidas de capacidad para su fraccionamiento.
En el inventario, posterior al fallecimiento de los Aguiar-Ugarte, se explicitan: una tahona corriente y moliente, con su casa y corral de tahoneros, un “peón” de tahona de quebracho, un sernidor, dos cuartillas, una romana, además de hachas, asadas, hachuelas, escoplo, formón, martillos, pico, alcayatas, lima, alicate, serruchos, etc., y una diversidad importante de maderas.En el padrón de 1744, entre la mano de obra que se registró con Aguiar (2 esclavos de 50 y 20 años), se considera un vizcaíno “albañil”, y a Ugarte un nativo “albañil y carpintero”. Rafael Aguiar es el único propietario de tahona que se ha encontrado en ésta época en la zona. Consideramos la posibilidad que los Aguiar y los Ugarte arrendasen parte de sus tierras (o permitiesen el usufructo de las mismas), a cambio de cereal para su molino. Es más, podría suponerse cierta concentración de la molienda de la zona, dada su cercanía para los productores y el río como canal hacia mercados más amplios.
Una importante población ya arrojaba el censo de 1744
En 1744 se realizó un censo demográfico en este núcleo poblacional que, al paso del tiempo, fue base para la conformación de la Ciudad de San Nicolás, que durante mucho tiempo se dijo fue “organizada o fundada el 14 de abril de 1748”. Ese censo, que fue dispuesto por el Alcalde Provincial José Ruiz de Orellano y orden del Cabildo de Buenos Aires por mandato del Gobernador y Capitán General de las Provincias del Río de la Plata, estuvo a cargo del Capitán Bernardino del Pozo, Juez Comisionado de este “Pago de los Arroyos”. Ese recuento debía consignar “todos los vecinos; estantes y habitantes; de ambos sexos… con toda claridad y distinción expresando el nombre a personas que tiene de familia, mujer, hijos, criados esclavos o libres, huéspedes o agregados con la misma distinción y si las casas que habitan son propias o arrendadas incluyendo generalmente casados y solteros, residentes de paso o forasteros que se hayan (de) ir (en) breve, y también los desertores de la Colonia y otros extranjeros los asentará con la distinción necesaria y señal al margen”.
Este empadronamiento en el Pago de los Arroyos, “Costa del Paraná”, jurisdicción de la ciudad de Buenos Aires”, se inició con las familias que indica el título, como sigue: 19″Primeramente a don Rafael de Aguiar natural de Santa Fe, de edad de cuarenta años casado con Doña Paula de Ugarte natural asimismo de Santa Fe de edad de veinte y dos años. Tienen hijos legítimos a Miguel Gerónimo de cuatro años; Pascual José de año y medio. Es persona hacendada, tienen sus casas y cantidad de ganados mayores y menores, tiene dos esclavos, el uno llamado Juan Antonio de edad de cuarenta años; Cristóbal de edad de veinte años, y a un muchacho huérfano llamado Pantaleón, natural de Santa Fe de edad de nueve años. No tiene otra persona alguna en su casa, su ejercicio es de cuidar y gobernar sus haciendas, y volvió a decir está en su casa y compañía de Manuel Arteta natural del señorío de Vizcaya de edad de cincuenta años, su ejercicio es albañil”.ídem se alistó al Maestre de Campo don Francisco Miguel de Ugarte natural del Puerto de Santa María, Reinos de España; de edad de sesenta años casado con Doña Casilda Zepeda natural de Santa Fe, su edad de cuarenta años, tiene hijos legítimos, a Ventura de veinte y tres años, Gabriel de veinte y siete, Casimiro de catorce, Victorino de ocho, Antonio cinco y Esteban de un año.Viven en casa y tierras propias, y es persona muy hacendada; tiene en su casa a un negro su esclavo llamado Manuel de edad de doce años; y una negra llamada María Rosa, casada con Pedro, negro libre, natural de la colonia, de edad de treinta años, y un indio carpintero y albañil natural del Paraguay, llamado Gabriel, de edad de cuarenta años casado con Tomasa y mestiza natural de Buenos Aires su edad veinte y siete años, no tienen hijos no hay en su casa otra persona alguna”.
Los nombrados eran los integrantes de las dos familias que iniciaron las posibilidades de la integración y organización de todos los vecinos del lugar para concretar la fundación de la ciudad: 8 personas vivían en la hacienda de la familia Aguiar, y trece en la de los Ugarte.20Sobre la residencia de Aguiar en el Pago de los Arroyos, su familia y el censo de 1744, transcribimos fragmentariamente una nota de José E. de la Torre, publicada en “El Progreso” del 13 de abril de 1964 que, en la parte que nos interesa a los fines de este trabajo, expresa: 21″Aquí lo vemos a don Rafael de Aguiar ya casado, en 1744, propietario de su estancia “con ganados mayores y menores”, con su flamante esposa y con sus dos hijos: Miguel y Pascual Rafael 22, radicado en el pago de los Arroyos, donde en 1748 fundará la ciudad de San Nicolás de los Arroyos….”Con la muerte de Francisco Miguel Ugarte, escribe Mariana Canedo 23 , en 1747, la fragmentación de “Los Tres Arroyos” se intensificó; los herederos fueron vendiendo paulartinamente sus parcelas. Varios de ellos lo hicieron a personas que se encontraban viviendo en la zona desde hacía unos 20 años, y que se habían establecido en las tierras que luego comprarían. Asi Javier Francisco, el hijo mayor, nombrado albacea y curador de los bienes, concretó varias ventas por si y “en comunidad” en terrenos con límites en litigio. Los propietarios resultantes de estas ventas, efectuadas en la jurisdicción de Buenos Aires, se encontraban con anterioridad viviendo alli. Pallier, Juan León. “Llegan las provisiones”. Ya nos hemos referido a los Arias Montiel, asentados en el Arroyo del Medio, y a Lorenzo Bernal censado en 1744, en la zona de Las Hermanas, un cordobés de 40 años, casado con Juana Soria, cordobesa de 30 años, y cuyas tareas eran de “trabajar en el campo”, y andar con sus carretas fletándolas para Buenos Aires y otras partes, sembrar trigo de lo que se mantiene, y cuidar su ganado. A doña Micaela Lezcano la encontramos en 1744 viviendo con su esposo, Don Juan José Basualdo, y cuatro hijos en el paraje del Arroyo Seco (hoy Partido de Ramallo). Basualdo trabajaba con su tropa de carretas y de cría y cuidar mucho número de ganado (mayores y menores), y crías de yeguas”, contando con mano de obra no esclava. El matrimonio Lezcano-Basualdo, dentro de los registros del Censo de 1744, tenía registrada una nativa guaycurú, y un nativo de Córdoba, casado con una parda libre, de Buenos Aires. Juan José Basualdo, en 1744, poseía el título honorífico de “Don” no siendo propietario. Al morir en 1753, poseía bienes tasados en 3642 pesos, dentro del predominio ganadero diversificado, resaltaba su especialización en producción y venta de ganado mular orientada hacia el mercado potosiono. Basualdo murió en uno de los viajes con sus tropas hacia el norte, a la altura de Santiago del Estero.”Las cifras que arrojó el Censo de 1744, para los actuales Partidos de San Nicolás de los Arroyos y Ramallo, determinó que: Las Hermanas, tenían 181 habitantes; Costa del Paraná, 249; Arroyo Seco (Paraje de Ramallo), 67 y Arroyo Ramallo, 237; y Arroyo del Medio 214; total 948 habitantes.