Se espera que llegue entre los meses de junio y julio, y por ese motivo ya se están tomando medidas preventivas. La altura del río Paraná podría alcanzar la misma altura que en febrero y que produjo el socavamiento del Puerto local.
Con el río en 5 metros no se verán perjudicados otros sectores de Ramallo, que no sean los paradores costeros y la zona de islas. Pero con el espectáculo desolador que se viene observando desde diciembre del año pasado, y profundizado a partir de los primeros días del año, la situación preocupa sobremanera a las autoridades locales. “Hay un análisis previsto para el segundo trimestre del año y nos pronostican que habrá picos de crecida para junio o julio. La variable va a estar relacionada a las inclemencias del tiempo y la cantidad de agua que pueda llover va a tener un peso muy importante en el panorama que se puede esperar”, declaró el Prefecto René Mafka.
Fuente: Diario El Norte
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