El Municipio continúa reforzando los controles en los accesos a la ciudad. Desde el pasado viernes, se implementó el test de olfato, como una medida más de prevención para el cuidado de todos los nicoleños.
En el primer día de la nueva medida, se registró un caso sospechoso, ya que un comerciante que venía de la ciudad de Pergamino fue analizado y no pudo determinar el producto que estaba oliendo. A partir de allí, se activó el protocolo de COVID-19 y el comerciante regresó a su localidad acompañado por las fuerzas policiales.
Hace unos días, el Intendente Manuel Passaglia había informado que “aún quedan 31 nicoleños que vinieron del exterior o de otras provincias con circulación de virus, que están siendo monitoreadas para el cumplimiento de la cuarentena”.
“Hoy en San Nicolás no tenemos ningún caso de coronavirus, hemos logrado bajar la estadística a cero, producto del esfuerzo de todos. En cuanto al seguimiento que venimos realizando a diario, es un trabajo que funciona como una herramienta más para fortalecer la prevención y cuidar la salud de todos los nicoleños”, contó el Intendente.
En ese sentido, personal de tránsito municipal junto a las fuerzas de seguridad seguirán realizando controles en los cinco accesos que tiene San Nicolás, una medida que se implementó el 18 de marzo y que ha dado muy buenos resultados en materia de prevención y cuidados de propagación del virus.